El limón Tahití (Citrus latifolia) es una variedad de limón sin semillas originaria de la Polinesia Francesa. Se distingue por su corteza lisa de color verde brillante cuando está inmaduro y amarillo intenso en su punto óptimo de madurez. El interior es jugoso, con un sabor ácido y fresco característico. El árbol de limón Tahití es una planta perenne que puede alcanzar hasta 6 metros de altura con espinas cortas. Requiere de climas cálidos tropicales para su óptimo crecimiento y produce durante todo el año. El zumo de limón Tahití es muy apreciado en cocina y repostería por su intensidad, siendo ideal para la elaboración de bebidas, aderezos, salsas y platos de pescado. Contiene altos niveles de vitamina C. Se cultiva comercialmente en América tropical, el Caribe, Asia y África.